Capítulo 85

Novela: “Esta es mi historia, no un cuento de hadas”

Capitulo ochenta y cinco

A los pocos minutos regreso.

Yago: Listo, ya se durmió –me dijo sentándose a mi lado y dándome un beso-
Maca: Desde cuando te quiere más a vos? –Mirándolo con mis cejas levantadas-
Yago: No me quiere más a mí, a los dos nos ama, pasa que le divierto mas eso es todo…
Maca: Soy aburrida? –Pregunte de la misma forma-
Yago: No! Nada que ver…
Maca: Y entonces?
Yago: Te aseguro que cuando sea más grande, ni se me va a querer arrimar…
Maca: Por!?
Yago: Va a necesitar consejos de una madre, no de un padre que no la va a dejar salir con chicos hasta los cuarenta -me sonrió tierno y me volvió a besar-
Maca: -reí- te amo

Nuestros labios se volvieron a juntar, un beso lento, tierno. Sus manos se posaron en mi cintura, y el beso fue volviéndose más rápido, fogoso, pero aun seguía siendo tierno y lleno de amor. Todo lo que hacíamos tenía mucho amor. De a poco, fuimos retrocediendo para acomodarnos bien en la cama, esta vez, yo fui la primera en quitar su remera, el me sonrió e hizo la misma acción, pero conmigo. Con su ayuda pude quitarle su jean, y él, el mío. Quedamos en ropa interior… sus labios ya no besaban mi boca, si no que estaba humedeciendo mi cuello.

Yago: Te amo… -me susurro despacio en mi oído-
Maca: Te amo… -ya con sus labios en mi boca-

Coloco sus manos debajo de mi espalda –ya que estaba acostada- y me desprendió el corpiño, haciendo que de un solo movimiento, me lo quite. Las últimas prendas que nos quedaban, fueron quitadas rápidamente, y tiradas al frio piso de la habitación.
Ya nos habíamos quedado completamente desnudos, cuando el comenzó con aquella acción, que siempre al principio era demasiado molesta, pero luego se transformaba en placer…

Maca: Te amo… -logre decir cuando estaba con mi cabeza apoyada en su pecho-
Yago: Yo mas mi amor –abrazándome- sos hermosa –beso mi cabeza dulcemente-
Maca: Amor… -le dije con mis ojos cerrados-
Yago: Que pasa? –suspiro cansado-
Maca: Despertarme antes que te vayas, te quiero acompañar… -dije a punto de dormir-

Las horas pasaron, deben haber sido las seis y media cuando Yago me despertó con pequeños besos.

Yago: Amor… me tengo que ir al aeropuerto –me dijo cuando yo apenas abría mis ojos-
Maca: Te acompaño –bostezando-
Yago: Quedate, estas muy cansada… -me dijo al verme, con mi cara mal del sueño-
Maca: No, me cambio y voy… -interrumpida-
Yago: Quedate o me enojo –amenazo-
Maca: Te amo –lo abrace y besaba su cuello- te voy a extrañar
Yago: Yo también te voy a extrañar mucho amor –beso mis labios-
Maca: Que te vaya bien –sonreí cansada-
Yago: Estudie, me va a ir bien –seguro- me voy, mándale saludos a Vicky que está durmiendo y no la quiero despertar –me beso la frente y se marcho-

Aproximadamente unos veinte minutos después, me levante por un dolor de panza, no era tanto pero me dolía. Me fui a hacerme un té, mientras veía algo en la tele. El dolor se fue, y sentí que Vicky se despertó.

Vicky: mama tengo hambe –dijo al verme entrar a su habitación-
Maca: Bueno, veni que te hago la leche –le sonreí y la levante en mis brazos-

Termine de hacerle la leche a Victoria, y se la di.

Vicky: mami, donde eta papa?
Maca: Se fue de viaje a Londres a rendir un examen
Vicky: Eh no! Nunca me lleva –apunto de llorar-
Maca: Victoria no te pongas caprichosa, la semana que viene vuelve –la rete-
Vicky: No, yo quiedo que mi papa venga ya! –Enojada tiro la mamadera-
Maca: Levanta la mamadera, porque cuando llame por teléfono le voy a decir que no te traiga regalos porque te está portando mal –ella callada, con su carita de enojada, fue a traer la mamadera y se sentó en el sofá, con los brazos cruzados- no te pongas así, la semana que viene vuelve, no llores –la levante y la puse en mis piernas-
Vicky: Es que tiempe se va y no me invita –llorando-
Maca: La próxima te lleva, si? –abrazándola-


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